Los chicos tienen la palabra

Las siguientes entrevistas fueron realizadas por alumnos de 3º8º y 3º9º de EEM 2 de Lanús "Francisco Ramírez" para el Espacio Curricular Institucional Periodismo II.
Este espacio es mi reconocimiento al esfuerzo, la tenacidad y la perseverancia de un grupo de adolescentes para conseguir la palabra de personas reconocidas dentro del mundo de la política, los derechos humanos,el arte, la ciencia, etc.


Entrevista a Gabriel Mariotto

“LO QUE QUIERO ES FORMAR PARTE DEL CONJUNTO"

Gabriel Mariotto es Licenciado en Periodismo y en Comunicación Social, recibido en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora. Es el presidente de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFCA) y el último interventor del Comité Federal de Radiofusión (COMFER). En 2003 trabajó como Subsecretario de la Secretaría de Medios de Comunicación.A los 45 años, Mariotto está casado y es padre de un hijo. Y es uno de los impulsores de la Ley 26.522, la nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisuales.

Por Daniela Giménez y Samantha Vidal Godoy



¿Cómo fueron tus comienzos como docente?
Los últimos años de la Facultad ya me encontraron como Ayudante de Cátedra. Se da mucho que cuando te interesa una materia en particular y la cursada la hacés con mucha responsabilidad y estudiás mucho, el docente titular te convoque para formar parte de un cuerpo de auxiliares porque te ve condiciones e inquietudes. Yo lo hice en Política de los Medios de Comunicación.

¿Cuáles consideras que fueron los hechos en tu vida que te llevaron a tener esta vocación?
De chico, estudiando en el colegio primario, se hacían diarios murales. Había una pared donde poníamos información y yo siempre me anotaba para ser parte de eso o de algún periódico que hacíamos. Siempre me gustó el periodismo. Veía la posibilidad de meterme en todo desde una profesión. Porque podíamos conocer de fútbol, de política, de temas culturales, de temas sociales para después poder opinar o poder formar parte. Entonces, me parecía que el periodismo te metía en todos los temas. Y si uno lo hacía con responsabilidad y conocimiento (no es opinar livianamente), sino que opinás desde un lugar con responsabilidad, me parecía bárbaro. Todo era multidisciplinario en el periodismo.

¿Cómo llegaste a ocupar el puesto de Decano de la Facultad de Ciencias Sociales de Lomas de Zamora?
Mientras estudiaba, también tenía preocupaciones por el destino de la Facultad y militaba en agrupaciones estudiantiles. Milité en los claustros graduales, en los claustros docentes y formé parte de un grupo de compañeros que, llegado un momento, me dieron la responsabilidad de conducción de la Facultad como Decano en un período. Pero el ejercicio de la docencia más la militancia, me llevaron a formar parte del destino de la Facultad. También la oportunidad de que los compañeros me eligieran como Decano.

¿Qué papel juega la política en tu vida?
No conozco etapa de mi vida sin que haya tenido que ver la política. Me acuerdo en jardín de infantes, en el año 69, estaba en salita Rosa, y fue el secuestro de (Pedro Eugenio) Aramburu. Recuerdo vivir los temas de la política como el Cordobazo. la construcción política del país y del mundo como parte de mis inquietudes. Quizás por mi familia o los compañeritos del colegio. La política forma parte central de mi vida. Después, uno descubre su vocación y se siente interpretado por corrientes filosóficas que uno supone, interpretan la sensibilidad que uno tiene. A mí pasó eso con el peronismo. Me sentí peronista haciendo introspección. Uno vive como un militante del peronismo.

¿Qué sintiste al ser electo Concejal por el apoyo popular?
Muy bien. Esa es otra de las formas de canalizar la construcción colectiva cuando fui electo Concejal. Estoy muy contento. Es una linda experiencia para interactuar con los vecinos y los compañeros que se organizan para cambiarles el futuro a la sociedad de hoy. Es un desafío muy interesante. Es una experiencia política llena de responsabilidad.

¿Sentís que tus sueños acerca de Lomas de Zamora, tu lugar de origen, donde te criaste, puede llegar a concretarse de tu mano?
Creo que todos tenemos que sentir que podemos aportar para vivir en una comunidad. Todos nos realizamos individualmente en una comunidad que se realiza colectivamente. El desarrollo individual carece de sentido. Entonces todos tenemos que aportar para transformarla. Es un lindo desafío y no se termina nunca. Es algo que no se puede detener: permanentemente se necesitan más ideas, más reflexiones, más acción, con la idea de cumplir con un objetivo. Que haya plena justicia social de nuestro país.

¿Cuál es tu posición con respecto a los medios?
Tiene que haber pluralidad y diversidad. Los medios en Argentina jamás tuvieron un sistema de pluralidad. Si bien podemos decir lo que queremos en los medios, no todos tenemos la oportunidad de acceder. Sólo puede decir lo que quiera el que tiene el micrófono, el que tiene el acceso. La nueva ley de medios que nosotros impulsamos con la Presidenta de la Nación, tiene otro diseño para que haya más libertad de expresión en pluralidad y en diversidad.


¿C
uáles fueron las razones que te llevaron a integrar al grupo de redactores e impulsores de dicha ley?
Tuve la oportunidad de que la Presidenta de la Nación me convocara para este cargo, el de la autoridad de aplicación (que era el viejo COMFER) , y así poder canalizar la experiencia de 26 años de búsqueda de conceptos para terminar con la ley de la dictadura. Esto lo empezamos nosotros en la Facultad en el año ´82, a principios del ´83. Todavía había dictadura militar y ya cuestionábamos la ley 22.285. Era lógico. Lo que era impensado es que desde el gobierno, una presidenta se jugara a enfrentar esos poderes terribles. Ella tuvo el coraje cívico y todos nosotros volcamos nuestra experiencia.

¿Creés que la sociedad, en general, está informada acerca de la ley o sólo recepciona la información que emiten los medios?
Cuando la Presidenta decidió enviar la ley al Congreso, se dio el trabajo más difícil: hacerla caminar por foros para que todos los ciudadanos que tuvieran inquietudes pudieran conocer el texto de la ley y aportaran reflexiones que después fueron consideradas. La ley caminó mucho por todo el país y fue una ley de gran participación. Entonces, esa estrategia de la Presidenta logró que la ley se conociera más y que no se conocieran solo por lo que dicen los medios monopólicos. Si estos medios se ven afectados con la democracia comunicacional, dicen cualquier barbaridad. A esas barbaridades que dicen, le aparece una sociedad que ha reflexionado y que empieza a resignificar. Es muy importante cuando uno ve un medio, lee un diario o escucha la radio, preguntarse quién emite, quién es el dueño de ese medio. El diario y la televisión dicen tal o cual cosa porque están defendiendo intereses. Y eso en nuestra cabeza genera una reflexión que hace que no te quedes solamente con lo que dicen los demás, sino que te encuentres en una situación activa. Ves la tele y protestás contra el noticiero.

Sabemos también que formas parte del programa Fútbol para Todos ¿En qué consiste tu coordinación?
En garantizar que por televisión abierta lleguen los diez partidos de fútbol a todos los ciudadanos del país. Cambió una ecuación que era muy injusta: que para ver fútbol había que pagar. Y es el deporte más popular de la Argentina. Un acontecimiento deportivo de carácter relevante (de acuerdo lo que dicen los tratados internacionales) tiene que verse en televisión abierta y en igualdad de condiciones.

¿Cómo llegaste hasta el programa?
Me convocó la Presidenta de la Nación para coordinar esa tarea.Todas tus actividades están ligadas a la gente.

¿Cuál creés que fue el eje que te llevó a orientar tus actividades siempre a un fin masivo?
Mi inquietud es, precisamente, aportar en conjunto a modificar estructuras que parecían intocables. La ley de la dictadura era un problema para la democracia y para la sociedad. Había que generar reflexión para que la sociedad discutiese una ley de la democracia. Y eso lo logramos aportando desde nuestro lugar. No somos los únicos. Esto es una construcción colectiva y Fútbol para Todos es lo mismo. Creo que lo que me ha facilitado esa tarea es formar parte de un gobierno que no se detiene a la hora de enfrentar poderes. Porque esta política en otros gobiernos siempre hubiese sido cuestionada. Hay un coraje de la Presidenta que genera condiciones objetivas para que podamos hacer este tipo de aportes.

¿Cuales son sus metas a cumplir en el futuro?
No me pongo metas personales. Lo que hay que seguir es una máxima Sanmartiniana: ‘Serás lo que debas ser o sino no serás nada’. Tenés que formar parte de un conjunto. Y lo que más castiga a la construcción política, es el ego. No es que quiera tal o cual cosa para mí. Si me toca estar en el lugar de dirigente, bien. Y si me toca estar en un lugar de tropa, también, bienvenido sea. A mis 45 años he estado conduciendo y he estado en tropa. Muchas veces conduzco a alguien y recibo ordenes de otro. Para saber mandar, hay que saber obedecer, hay que formar parte del conjunto. Y el conjunto decide cuál es tu rol. Ahora, si uno se encapricha con los roles, atenta contra la transformación. Yo no tengo capricho, ni objetivos locos, lo que quiero es formar parte del conjunto.

Entrevista a Claudio María Domínguez

“SI UNO NO CRECE, NO TIENE SENTIDO VIVIR”

Claudio María Domínguez nació el 13 de agosto de 1960. Se hizo conocido por participar en el programa de televisión ‘Odol Pregunta’, donde muchos lo creyeron un niño prodigio. Hoy, podría decirse, que es un guía espiritual para la gente. Es también escritor, productor, locutor, guionista y presentador de TV. Fue uno de los pocos que tuvo el privilegio de entrevistar a personalidades como el Papa Juan Pablo II y a la Madre Teresa de calcuta. En la actualidad, Claudio está casado con Eliana y tiene dos hijos.

Por María Belén Callara y Sabrina Telechea Sequeiro.



¿Cómo llegaste a participar de Odol Pregunta?
Me pareció que era una buena oportunidad a esa edad ,a los seis años, de ganarnos unos pesitos (un millón de pesos), y que pudiésemos pagar todas las deudas de la familia gracias a un concurso tan conocido de la televisión blanco y negro. El país se paraba para verlo y yo pensé que íbamos a poder salir al frente. Y fue muy bien. Tres años después logré que me llamaran: Nos ganamos el premio, pagamos todas las deudas, viajamos por todo el mundo, más que los ricos. Y fue lo que me cambió la vida.

¿Cómo fue que tenías tantos conocimientos sobre mitología griega a esa edad?
Mi casa era un ambiente muy culto. En lugar de leer a veces los cuentos para niños, que suelen ser más sangrientos y contraproducentes, me leían un poco la vida de Ulises, los viajes, las aventuras de los héroes del Olimpo, los dioses. Ahí detrás hay también una enseñanza espiritual muy fuerte.El tema es que yo en esa época estaba deslumbrado por los héroes, no veía todo el trasfondo espiritual. Eso después vino con el tiempo.

¿Cómo pasaste de estar en la televisión a estudiar Derecho?
En un punto sentí que había que tener una carrera universitaria. Hice Derecho, después me pasé a Ciencias Políticas y cuando ya terminaba y me iba a ir a la carrera diplomática dije: ‘no son lo mío las embajadas del mundo’. Había viajado mucho, entrevistaba a los embajadores y veía que eran vidas muy vacías, muy chatas, muy chotas (risas). Y en un punto dije: ‘más bien voy a entrevistar a grandes seres’. Primero no tan profundo. Yo soñaba con los Oscars de Hollywood, García Márquez , el festival de Cannes, los directores de cine y Paul McCartney . Y con el tiempo eso fue llevando a que una vez que conocés todo eso, todo ese deslumbramiento, y ves que tampoco cierra mucho tu historia, dije: ‘¿a qué seres espirituales verdaderos puedo entrevistar?’ y soñaba con la Madre Teresa, con Sai Baba, con el Papa, con Dalái Lama. Y ahí se dio mágicamente todo y el universo se abrió y pudimos trasmitir todas estas cosas y cada vez mejor y cada vez más fuerte el ecumenismo: que Dios es uno para todos, que todo es Dios, que todo es uno, que todo es amor, que todo es perfecto.

¿Cómo fue que pasaste de entrevistar a John Travolta a querer entrevistar al Papa?
Yo sentí que ya era una etapa terminada, una etapa divertida. Y ahora nos podíamos ir a una etapa graciosa y profunda, no solo graciosa frivolona (sic) sino que se podía hablar de espiritualidad con humor, con amor. Que el mensaje llegara a más gente, desde la no solemnidad. Espiritualidad práctica.

¿Y cómo te sentías al entrevistar a estas personalidades?
Impactaba. En tu propia vida, es un cambio brutal. Tu propia vida estando con ellos se hace más profunda y más linda. Así que con mucha gratitud.

De las personas que entrevistaste ¿cuál fue la que más te deslumbró?
Sai Baba y Madre Teresa. Sai Baba era el más profundo espiritualmente, te miraba y te abría la cabeza, en los últimos diez, veinte años de vida. Madre Teresa era la santa en vida: generosidad, amor en acción, servicio. El otro era profundidad brutal: te hacía replantearte toda tu historia en una pregunta, en una respuesta, en tres minutos. El que más me deslumbró, porque volví cuatro veces a verlo, fue Sai Baba.



¿Por qué decidiste volver a la televisión?
Queríamos trasmitir el mensaje visualmente. Doce años atrás, nadie hablaba de esto, era más duro el tema. Empecé en el cable humildemente, comprábamos nuestro espacio, nadie nos regalaba nada, ya que todo siempre era un negocio. Y hace poco se dio la magia de que (Daniel) Haddad nos diera lugar en C5N, con profundo amor para que pudiéramos hablar de luz, de servicio, de alegría existencial. Y el mensaje se hizo mucho más masivo.

¿Cómo fue que terminaste haciendo un guión para una telenovela?
Eso fue mucho antes de toda esta etapa, en el '94, 16 años atrás. Me gustaba escribir ficciones. Vino (el actor) Gerardo Romano un día, yo lo veía tan trasgresor, medio sexópata y dije ese ‘es el villano perfecto’. Y salió La Marca del Deseo que no tenía sexo como se hizo creer. Eran trece capítulos y de los trece, uno solo era el sexo. Otro era la soledad, la locura, las relaciones enfermas, el miedo, la culpa. Y Romano le metió sexo hasta en la sopa. Entonces la iglesia lo prohibió. Pero después cuando se pasó, era más infantil que ver a (Marcelo) Tinelli, a Moria Casán y Nuevediario. Pero me dio también mucha repercusión y lucha contra la censura.

¿Cómo es que tu vida dio un giro tan grande para terminar haciendo lo que haces hoy en día?
La misma vida en estado de ignorancia te va llevando a que, en un punto, busques más sabiduría. Si uno no crece, no tiene sentido vivir.

¿Quién te influenció más en el campo de la espiritualidad?
Sai Baba y la Madre Teresa, diciéndote que no busques nunca más maestros afuera, sino que el verdadero maestro está en vos, siempre está en vos.

¿Cómo fue la experiencia de escribir un libro?
Maravillosa. Y uno lleva a otro y a otro y se hizo automático. Página en blanco y yo me sentaba y brotaban pensamientos desde el corazón y me hizo mucho bien. Los primeros fueron La vida con Madre Teresa, La ciudad del amor en la India, El desafío de ser feliz, Todo es Uno y el último fue Despertemos Ya Mismo.

¿Cuándo empezaste a hacer las charlas?
En la misma época en la que volví de la India por primera vez. Estaba deslumbrado y con ganas de mostrarle al mundo que se podía tener una vida diferente. Ahí empecé con Alma y vida. Y se convirtió, después, en un fenómeno masivo. Ahora hacemos cuatro, cinco por semana, literalmente

¿Qué pensás que generas en la gente?
Los que aman esto, lo aman con alma y vida y el que no, hay 90 opciones de cable. Están Tinelli, (Aníbal) Pachano, (Graciela) Alfano, Crónica TV, todo el puterío del mundo. Vos podés elegir ver lo que vos quieras. Esa es la divina elección.

Por último ¿Qué es lo que más disfrutás de lo que hacés?
Disfruto, básicamente, esto: la difusión espiritual. El momento, para mí, más extraordinario, en el que estoy en el aquí, ahora, profundo. Entonces amo, y peleo, a veces, a capa y espada porque esto pueda seguir existiendo. Pero, en general, todo. La idea es volver al presente. Ahora voy a mi casa, me tiro un rato con la beba. A mi edad, tener una beba, es muy provocador. La idea es que la relación familiar sea profunda, no desgastarla, que sea mutua, libre, sana. Pero básicamente, esto de la difusión espiritual es mi deleite más profundo.

Entrevista a Carina Zampini

“EN EL CINE, TENGO LA SENSACION DE QUE ME PUEDO ABURRIR”

Carina Zampini es actriz, tiene 35 años, está casada y tiene un hijo, Manuel. Actualmente trabaja en la telenovela Malparida, donde interpreta a Martina Figueroa. La entrevistamos en la puerta de la productora Pol-Ka.

Por Carolina Díaz Bechara y Rocío Giannico.



¿Cómo empezaste tu carrera?
Empecé a trabajar en Mujercitas en el año ’95, medio de casualidad. Fui para un casting a Canal 9, para ningún personaje en particular. Y me contrataron en el 9 para un programa cualquiera. Después me incorporaron a Mujercitas.

¿Estudiaste actuación?
Empecé a estudiar teatro a los 9 años, en la escuela primaria a donde yo iba. Terminé el primario, seguí estudiando y pasé al grupo de adultos.

¿Alguien o algo te inspiró a estudiar teatro?
En realidad, en la escuela había un teatro y un coro. Yo me anoté en los dos y después me dijeron que no podía hacer las dos cosas. Entonces elegí teatro y seguí. Estuve años.

¿Cuál de todos tus papeles que hiciste te gusto más?
El que más me gustó fue el de Padre Coraje, Ana Guerrico.

¿Por qué?
En realidad, porque era un personaje que estaba muy bien escrito, era justificadamente mala y la gente terminó queriéndola de alguna manera.

¿Encontraste algo común con algunos de tus personajes?
No, no necesariamente. No es algo que uno analice demasiado.



¿Y Martina?

Es parecida a mí en algunas cosas: es una mina trabajadora, responsable, muy estructurada.

¿Le cambiarias algo a este personaje ?
No, a mí me gusta el personaje de Martina. Porque es una buena que tiene carácter, que toma decisiones a veces no demasiadas acertadas (ya van a ver en los capítulos subsiguientes). Pero es una mujer con carácter, que defiende lo que quiere, es concreta.

Desde tu punto de vista ¿Qué es lo que atrae de la tira a la gente ?
Yo creo que muchas cosas. Es una novela poco común. Para la gente ver a la protagonista asesina, es como raro. Todo genera un interés. Y además hay buenos actores y una muy buena historia que convoca. Creo que hay muchos factores.

De acá a 10 años, ¿Cómo te gustaría verte?
Primero quiero una permanencia, la posibilidad de vivir de seguir mi carrera, de la actuación. Y haber aprendido más , , hacer teatro. Me encantaría tener la posibilidad de trabajar en cine.

¿Tenés pensado en trabajar hasta una cierta edad?
No, trabajaría siempre. Disfruto actuar.

¿Siempre en la tele?
No sé si siendo más grande harìa tanta tira, son muchas horas. Por ahí me dedicarìa más al teatro.

¿Qué te gusta más el cine o la tele?
¿Ver o hacer? Yo no miro televisión, miro más cine. Y cine no hice nunca, es una cuenta pendiente.

¿Te gustaría?
No se como me encontraría en ese ámbito, porque es un trabajo en lo que todo se hace con mucha lentitud: todo se hace con tiempo, con mucha espera, con trabajo previo. Está buenísimo, pero yo soy hiperactiva. Es una de las cosas que me gusta de la tele, de la tira: el trabajo rápido. En el cine, no se, tengo la sensación de que me puedo aburrir. O capaz que no.

¿Viste algún papel que hayas pensado ‘este es para mí’?
No. A mí me gustan los personajes alos que le pasan cosas. Lo que me encanta, lo que me fascina, lo que me gustaría hacer es la película “Los Puentes de Madison”.

Entrevista a Leo Montero

“SI YO ME CREO TODO LO QUE LA GENTE ME DICE, SOY UN TONTO”

Leonardo “Leo” Montero es simpático y tiene un gran carisma. A los 37 años, está casado con María Belén Tedesco, alias “La Bichi” y es el conductor del exitoso magazine matutino “AM”, que se emite todas las mañanas, de lunes a viernes, en vivo, por Telefé. Leo también conduce “100% Lucha”. Antes de grabar el programa de Vicente Viloni y compañía, nos atendió en la recepción del canal.

Por Estefanía Escobar y Elizabeth Herrera



¿Cómo llegaste a la televisión?
Estudié periodismo en Córdoba y después de estudiar seguí jugando al básquet. Un tiempo más tarde, me empezó a interesar más aquello que había estudiado. Y así fue como arranqué, con un par de programas de radio en una emisora FM de Carlos Paz. Después empecé a hacer televisión y luego pasé a Córdoba Capital, a los canales de aire. Todo ese proceso me llevó dos años. Y en el ’94 decidí venirme a Buenos Aires a seguir probando, pero en algo más grande. Y llegamos al día de hoy, a lo que estoy haciendo, consolidándome como conductor.

¿Te cansaste alguna vez de tener esta profesión?
No, jamás. Porque es una profesión que, en realidad, es una vocación. Entonces como me apasiona mucho la tele (si bien entiendo que es un trabajo y vivo de esto), es mucho mas el sentimiento que tengo por hacerlo que por la carga laboral del día a día. Me pesa muchísimo menos que a cualquier persona que haga un trabajo que no le guste.


¿Fue fácil adaptarte a ser famoso y a los fans?
(Sonrisa cómplice) Yo no soy un cantante de pop latino que tiene sus fans parados en el Obelisco. A mí la gente me quiere y yo , también. Tenemos buena onda. Yo siento el cariño y eso es lo lindo: ser popular. Yo estoy en el canal más popular de todos y eso también pesa mucho. Y uno nunca está preparado para la fama, nadie está preparado para la fama (alza un poco la voz), porque no te enseñan qué es lo que significa ser famoso: de buenas a primeras, te empiezan a saludar todos, te piden autógrafos, te sacan una foto o conocen tu vida.

¿En qué nivel de fama considerás que están vos y el programa?
Hay distintos niveles de fama. El nuestro ahora es un nivel alto, quizás el más alto de mi carrera. Porque el programa va muy bien y tiene mucha repercusión. Todo lo que uno dice, todo lo que uno hace, cómo pensás, el público te pregunta. La gente presta muchísima atención a los medios en los que estás. Pero lo importante que uno tiene que saber es que no tiene que vivir de eso que genera. Si yo me creo todo lo que la gente me dice, soy un tonto, porque voy a terminar mal.

¿Tenés alguna otra profesión aparte de la de conductor que todos conocemos?
¡Soy muy buen cebador de mate amateur (sonríe), cebo muy bien mate! Hablando en serio, soy casi traductor de inglés pero no por título, sino por estudio. No laburo de eso, no tengo otra profesión que haya estudiado así como periodismo. Después he implementado un montón de cosas a la conducción: periodismo, fonoaudiología, viajes, cosas relacionadas con la cultura y con el deporte. Un montón de condimentos que son necesarios para mi manera de trabajar como conductor Pero otra profesión, no.

¿Cómo es un día en la vida de Leo Montero?
Por la mañana es siempre igual, es rutinario. Me levanto a la misma hora, desayuno un poco, llego al canal, sigo desayunando, hago el programa y después difiere. Hay días que termino y me voy a jugar al básquet. Y hay días como hoy, que me quedo a grabar 100%100 Lucha. Hay días que tengo notas, días que tengo reuniones, voy al banco, tengo eventos, etc. etc. Por suerte mis días son diferentes. Me arrutino(sic) en algunas cosas y me desestructuro en otras. Sino, sería muy aburrido.

Entrevista a Hernán Garibaldi

“CUESTA MUCHO VIVIR DE ESTO”

Hernán Garibaldi tiene 32 años, una hija y está casado. Toca instrumentos de percusión. Su especialidad son las tumbadoras. Tocó varias veces de invitado con Callejeros, su banda siempre hace de soporte en los recitales de la banda de Villa Celina y actualmente es miembro de Los Pérez García.

Por Melisa Ucedo


¿Cómo fue que decidiste a tocar y a dedicarte a la música?
Todo esto empezó cuando yo tenía 6 años. Mi abuela me trajo un tambor de Uruguay. Y ahí empezó todo mi fanatismo por el tambor. Y desde ese momento, nunca más lo pude dejar. Empecé a tocar en el colegio primario, con mi hermano que toca la guitarra. Después de ahí, formé mi primer banda llamada los “Oxidados”
Más adelante, me independicé un poco, seguí haciendo cosas mías personales. Y desde ese momento hasta ahora, no paré nunca.

¿Y cómo fue que decidiste tocar en las bandas y hacerte conocido?
Fue todo muy natural. Es todo fruto del esfuerzo que le pone uno. Además, la motivación que siempre estuvo de parte de mis viejos y de parte de todos. A raíz de toda esa motivación, me empezaron a invitar a tocar. Todo el mundo que me llamó y me invitó, siempre estuve, porque yo quería tocar y entonces no me importaba ir. No me importaba nada. De última quería tocar y tocábamos todos… y de ahí todo se fue dando. Empecé con Harapos, actualmente estoy con Los Pérez García, con Callejeros, que estuve todo el último año. He tocado con trío de tangos, también folklore, pasé por todos creo, hasta cumbia (risas) , pero lo tomo como un trabajo.A veces me llaman y hago otras cosas.

¿Alguna vez apareciste en la tele?
Sí, en Canal 7, el año pasado, en el programa de (Juan Alberto) Badía. Hace poquito estuvimos en Canal 13 , en el programa de Bebe Contepomi.

Trabajaste con Callejeros, ¿cómo los conociste?
Yo empecé hace tiempo, una amistad muy grande con ellos. Cuando recién empezaron, yo estaba con ellos. Son todos del barrio de Villa Celina. Yo me crié ahí y los conozco de hace muchos años. Ellos comenzaron a tocar y yo empecé en la primera época con ellos y después seguí con otra banda, Harapos, porque era el estilo que mas me gustaba a mí. Los chicos siguieron, crecieron, tuvieron su éxito y en el último disco, me volvieron a convocar. Me llamaron para tocar unos temas de invitado. Y a raíz de eso, participé de toda la gira que hicieron con ese disco todo el año.

¿Cuál es el nombre del disco?
Disco Escultura.

Ese fue el disco en el cual tocaste, ¿no?
Sí, en ese disco fue en el que toqué y grabé el primer demo con ellos. También, toqué un montón, en el último disco que grabamos Los Pérez García. Y ahora estamos por hacer otro disco. Estamos haciendo la pre-producción del próximo disco.

¿Cómo se va a llamar?
Todavía no sabemos. En esta semana nos traen la edición del último videoclip, que fue el primer corte del disco Magdalena. Ahora estamos haciendo un videoclip del tema "Sigue la noche", que es una temita que cierra el disco. Y de ahí vamos a meternos en el próximo disco, ya están listos ocho temitas, ya cerraditos, nuevos, que vamos a sacar esta semana.

¿Cómo grabaste tu primer CD?
Mi primer CD fue un demo de 3 temas, a los 14 años. Fue mi experiencia. Después como disco general de un proyecto mío, con Los Pérez García y con mi proyecto, fuimos grabando un montón.

¿Estuviste con Callejeros la fatídica noche de Cromañón?
Estuvimos el día martes, teníamos la fecha para el día jueves, que fue cuando pasó esta desgracia. Pero no sé cómo fue, que 3 días antes nos avisaron que nos pasaban para el día martes y se hacía la presentación de los tres discos: Sed, Pasión y el último disco Rocanroles sin destino. Con los chicos teníamos una amistad desde del disco Sed, que fue su primer disco. Entonces nos familiarizaron más y nos invitaron a tocar el día martes en Cromañón. Y esto fue el día jueves. Esta tragedia fue el día jueves.

Entonces estuviste 2 días antes. ¿Y ese día simplemente no fuiste?
Me llamó nuestro bajista para comer asado y en realidad iba a ir a volantear una fecha en un teatro con los Pérez García. Íbamos a volantear la puerta y me llamó mi señora para comer asado. Yo ya me estaba yendo, no me dijo que me quede. Y en medio del asado nos enteramos que se había prendido fuego un boliche. Llamé y había sido Cromañón…

¿Tenés ahora algún proyecto nuevo o show en vivo proximamente?
Sí. Tocamos en vivo el 7 de noviembre. Nos invitó Cultura de Gobierno. Tocamos en el verano con Las Pelotas y ahora el domingo 7 de noviembre. Y después de eso, tenemos dos fechas más en el Circus que es a las 2:00 en punto, dos días seguidos. Después nos guardamos un poco hasta el 3 de diciembre, que cerramos el año y vamos a hacer una girita por el interior. Después nos guardamos para grabar el disco.

¿De qué tratan las canciones del disco?
Las canciones de Los Pérez García las hace el cantante y siempre son historias que le llegan a cualquier tipo común de barrio, son cosas que pasan, historias de noche, historias de la vida…

¿Cómo son las canciones de los Pérez García?
Las canciones de Los Pérez García son las cosas que pasan habitualmente en la vida de cualquier pibe. También a veces, tiran algún palito a la gente que se encarga de gobernar. En general, un poco de todo, alguna cosa alguna de joda…
Esto es lo que toco, las tumbadoras (comienza a tocar las tumbadoras), este instrumento el bombo, timbales, etc. Trato de manejar toda la percusión de Los Pérez García. Y también estoy dando clases.

¿Me enseñás?
Ja,ja,ja,ja,ja! Cuando quieras!!! Y trato de dedicarme a esto. Con la banda somos independientes y eso también te lleva a un sacrificio grande, porque imaginate que todo lo tenemos que manejar nosotros, pero también es bueno, porque no tenemos que rendirle cuentas a nadie. Pero cuesta mucho vivir de esto. Al que está recién empezando, le doy mi consejo: que no baje los brazos nunca. Si esto lo lleva dentro del corazón, que lo siga haciendo y que ponga todo lo mejor y la fuerza y las ganas…cuesta, pero nada es imposible, si le pones muchas ganas y empeño.




¿Sos el líder de la banda?
No, no, no hay líder. Generalmente, siempre a la gente le llega el cantante por ser el que está al frente. Pero, en Los Pérez García tenemos un liderazgo de nadie. Tratamos de hacer todos juntos, pero siempre para la gente es al cantante, el que ven al frente.

¿Cuántos integran Los Pérez García?
Los Pérez García somos 7: Federico Esquivel en guitarra, Domingo Catanzariti, en bajo, Pablo Tofanari, en batería, Alberto Olguín, en voz, Julio Medina, en teclados, Martín Sarceda, en saxo y Herman “Tatú” Garibaldi, en percusión. Y tenemos dos invitados, en la trompeta, Emma, y en el trombón, Hernán. Esos dos son invitados, pero siempre están en los shows.

¿Y por qué te apodan Tatú?
Por el enano de la serie La Isla de la Fantasía.

¿Por quién?
El enano de La Isla de la Fantasía. Cuando era chico me juntaba con unos pibes más grandes del barrio y me quedó un día Tatú, porque era chiquito. Después ya me acostumbré y hasta mi hija me dice así

¿Vos enseñás a tocar instrumentos?
Sí, sí, estoy dando clases de percusión. Enseño lo que es tumbadora, bongó, todo lo que abarca la percusión.

¿La batería cuenta?
La batería no cuenta. Es algo que me gusta, pero me aferré más a los tambores. Y a todo lo que proviene de África, los ritmos africanos, ritmos latinoamericanos, el son cubano, plenas, bomba, etc

¡Sabes tocar de todo!
Igualmente estoy estudiando. Estudié con Carlos Alas y con Pablo Mede, es quien actualmente me sigue dando clases porque sigo estudiando.

¿Comprás tus instrumentos o alguien o alguna marca o empresa te los da?
Los primeros, estas tumbadoras, son todos míos, los compré yo. Pero ahora que estoy tocando en vivo, tengo una marca, HDV, que me está dando instrumentos. Con eso me están dando una mano. La verdad que eso me vino bien, ayuda a seguir para adelante, es una motivación. El instrumento es la herramienta que uno usa y es importantísimo.”

¿Alguien en especial te inculcó tocar estos instrumentos?
A mi papá le gustaba mucho, porque como uruguayo, el candombe fue una influencia. Escuchando primero a Rubén Rada, que fue lo primero que llegó a mí al oído. Arriba de él yo tocaba mi primer golpe con el tambor. A mi papá, por ahí le gustaba tocarlo, pero nunca fue perfeccionista, tocaba en casa. Pero a mí me interesaba todo, ¿de dónde viene?, ¿Cómo es?, tenía intriga de chico. Hasta el momento en que crecí, y vi que estaba como enamorado del instrumento. Me empecé a aproximar y a estudiar la percusión, a ver de qué se trataba. Y hace años sigo tratando de perfeccionarme un poquito, cada vez mas.”

¿Cómo te llevas con tu banda?
Perfecto, somos una gran familia. Por eso el último disco que sacamos se llama “Súper Familia”, porque somos muy unidos. Somos todos gente grande, con su familia, hijos. El apoyo de la familia es muy importante, porque si no tenés el apoyo de ellos, sería un paso para atrás y acá lo que necesitas es el apoyo solidario de todos. Son muchas horas de ensayo, son muchas noches de ir a tocar, de viajes, estás fuera de casa mucho tiempo y con los años, eso es lo que hay que aguantar”

¿Desde cuándo los conoces?
Los Pérez García nos conocemos desde mi adolescencia, desde el año 93 más o menos. Yo ya era grande, veintitantos años. Pero los conozco a raíz de un amigo que tocaba con ellos. Después yo iba como invitado. Con el transcurso del tiempo, el percusionista que estaba con ellos, Piti, se bajó de la banda. Y como yo estaba con ellos todo el tiempo e iba a tocar de invitado cuando no podía tocar Piti, me propusieron quedar fijo en la banda.

Entrevista a Esteban Pérez

“LA PRIMERA VEZ QUE ACTUÉ, SENTÍ UNA EXPERIENCIA MUY LIBERADORA”

Esteban Pérez tiene 30 años y está soltero. Nació en la ciudad de Pehuajó, en la provincia de Buenos Aires, y abandonó una carrera, Agronomía, a medio año de haber empezado. Decidió venir a la Capital Federal en busca de más oportunidades para dedicarse a la actuación. El actor de Malparida nos confiesa que le gusta hacer el papel de villano.

Por Florencia Moisés y Daniela Esquivel


¿Qué te llevó a elegir esta vocación?
Un poco de todo. En principio, fue mi curiosidad por las cosas que tenían que ver con la literatura, el teatro, sobre todo la literatura teatral me despertaba muchísima curiosidad. Tengo un padre que es actor que estaba muy ligado de alguna manera a ese oficio. Y lo que me terminó de cerrar fue que la primera vez que hice un taller de teatro (cuando tenía, creo, que 17 años), sentí como una experiencia muy liberadora, lúdica, la posibilidad de juego casi terapéutica que me permitía explayarme o abrirme en determinados canales de mi vida que de otra manera no los tocaba.

¿Cuántos castings hiciste para poder obtener un papel como actor?
Hice un par de castings, bastantes, sobre todo hice audiciones en teatro para laburar mas en teatro. En televisión hice uno o dos castings, tuve un poco de suerte. Pero en teatro, que se maneja otro lenguaje, hice bastantes audiciones, no sé cuantas pero hice muchas. En algunas me fue bien y en otras me fue mal y en las que me sentí completamente frustrado por cosas que no hice, que podría haber hecho. Podés hacer un montón de cosas para hacer mágico el momento y que son casi irrepetibles.

¿Te gusta más el teatro?
Me gustan todos los lenguajes de este laburo: me gusta la televisión, el cine, me gusta el teatro. Digamos que como el primer AMOR es el teatro (sobre todo porque uno empieza a estudiar teatro no estudia la televisión como género estudia el teatro), entonces…si, hay una... (Se queda pensando) como una deuda sobre el teatro, sobre lo que uno aprende en la formación que es netamente teatral.

¿Te acordás como fue tu primer personaje?
Fue en teatro… (Se queda pensando), mi primer personaje en teatro fue en un infantil que se llama “El día de los colores”. Hacía de un asistente del intendente de un pueblo donde transcurrían un montón de cosas. Ese fue el primer personaje en teatro.

¿Con qué actor te sentís identificado?
¿Identificado? No sé si hay alguno con el que me sienta identificado. Si me gustaría estar emparentado con una línea de actores que son más ingleses. Me gustan Laurece Olivier, Anthony Hopkins Gary Oldman… hay un montón de actores que me pueden, a los que obviamente admiro. No sé si me siento identificado porque son verdaderos monstruos. Me fijo mucho en ellos, creo que he robado muchas cosas de ahí (sonriéndose).

De poder elegir, ¿Elegirías el papel del bueno o el de malo?
El de villano siempre es mucho más agradecido. Te da más posibilidades de jugar, tenés otra paleta de colores y aparte está todo permitido. El de villano es impune.

¿Quién te dio el mejor beso en la ficción?
Ah… (Riéndose) No recuerdo un beso en especial. Pero todos los besos siempre son bienvenidos, no existe uno mejor que otro.

¿Hay algún personaje que haya marcado tu vida?
Sí, claro. Hay dos personajes que me ayudaron, que me encaminaron en varios aspectos: una obra de teatro que hice hace dos años que se llamaba “Todo verde y un árbol lila”, que era una historia de un alemán judío que llegaba a Bs. As. en los años 40. Me gustó mucho laburar este personaje particular por la historia, por el contexto de la historia, por la segunda guerra mundial, la persecución nazi hacia los judíos…Digamos que uno observa la historia a una determinada edad y después queda como congelada, y volver a encontrar esta literatura y revisar la historia de la segunda guerra mundial, esa persecución en particular me… movilizó muchísimo. Y después otro papel en el que estuve muy bien que fue una obra de (Armando) Discépolo se llama Stéfano, también en el Teatro Cervantes. Ahí yo hacía Radamés. Era el personaje del hijo menor de clase media baja de inmigrantes que tenía un retraso mental. Me divertí mucho con ese personaje, me ayudó a investigar también sobre ese tema.

¿En alguna telenovela discutiste con algún actor o actriz?
Sí, claro, un montón de veces discutimos. Nunca me llegué a pelear con nadie. Pero la discusión o el cuestionamiento me parece que es un poco la madre de todos los actores. Inevitablemente cuestionamos. Y de eso se trata las escenas.

¿Con quién?
En general, lo hacemos habitualmente. Discutimos en el buen sentido para poder llegar a un acuerdo o a un no acuerdo para que la escena quede bien. Siempre a favor de eso, nunca es personal. Habitualmente se hace con todos, no sé si con uno en especial, con todos tratamos de buscarle una forma a lo que estamos haciendo y siempre hay una discusión de por medio.

¿Quién te parece el más divertido del elenco de Malparida?
Es un elenco muy divertido. Me parece que es un elenco muy homogéneo, que tenemos actores muy graciosos y muy divertidos (como estos de la oficina) y otros que no están en este plano, que nos toca el papel a lo mejor de más seriotes, que también somos muy divertidos. Por ejemplo, con Raúl uno se divierte muchísimo porque siempre nos tentamos. Pero en general, nos divertimos todos.

Por último, ¿Un sueño por lograr?
(Se queda pensando) Tengo varios sueños, lo que pasa que como son sueños a veces uno piensa que no se van a lograr, que son sueños nada mas, pero… (se queda pensando) me gustaría trabajar afuera, me gustaría poder laburar afuera en una producción de cine.

¿En algún lugar particular?
Me gusta mucho el cine europeo. Me gusta el cine checo, el inglés y el francés. Me encantaría…en principio tendría que hablar muy bien el idioma. Y después que me den bola (riéndose).

Entrevista a Sebastián Blanco

“Un gol con la Selección y esa camiseta valen muchísimo”

Sebastián Blanco tiene 22 años y es uno de los jugadores de fútbol más importantes surgidos en los últimos años en Argentina. El volante nos respondió unas preguntas en el playón del Club Atlético Lanús, su actual club.

Por Facundo Nieto y Bryan Riso.


Sabemos que empezaste jugando en el club 11 de Agosto de Lomas. ¿Cómo llegaste?
Yo vivía a 6 cuadras del club. Empezaron a repartir volantes que se probaban chicos. Yo era muy chiquito, tenía 4 años. Pero tenía 2 hermanos mayores. Mi mamá nos preguntó si queríamos ir y empezamos a ir. No comenzaba a competir todavía, pero empecé a entrenar en la escuelita. Así que arrancamos desde ese momento.

¿Ganaste campeonatos de Baby Fútbol?
Sí, sí, año ‘99 y 2000.

¿Cómo se dio tu llegada a Lanús?
Estaba en el club y un muchacho de ahí que a veces participaba en 11 de Agosto , me preguntó si quería venir a probarme y vinimos. Era muy chico…creo que fue en el año 98/99, no se competía, todavía no existía mi categoría en AFA. Así que empezamos a competir de vez en cuando.

¿Quién fue el técnico que más te marcó en las inferiores?
Yo siempre digo que se aprende de cada uno. De todos los que tuve aprendí algo. Por ahí siempre lo nombro a (Carlos) Lodico por el hecho de que estuve 4 años con él y fue un etapa de crecimiento importante. Pero al mismo tiempo (Ricardo) Carrizo, (Héctor) Enrique, (Egidio) Acuña, (Héctor) Romero…todos los que tuve fueron importantes.

¿Cuándo fue tu 1º pretemporada?
Primera pretemporada 2005, invierno 2005. Todavía el técnico era (Néstor) Gorosito. Y después cuando él se fue, en Noviembre, subí al plantel de 1ª.

¿Sufriste las consecuencias?
Sí, sí, obviamente, como todos: estar pelado y pagar derecho de piso, como siempre.

Debutaste en un partido con San Lorenzo ¿Qué te acordás de ese partido?
Me acuerdo que me tocó concentrar con (Sebastián) Leto y con (Santiago) Biglieri, justo los jugadores que habían hecho los dos goles del partido que ganamos 2 a 0. Y una alegría. Me tocó entrar en un partido liquidado, ya ganado. Eso también me daría un poco de tranquilidad, de disfrute. Y son imágenes que te quedan grabadas en la cabeza.

En el 2007 tuviste la posibilidad de salir campeón con Lanús ¿Qué te acordás de ese torneo?
Las imágenes están intactas. Me acuerdo de cada partido, de cada concentración, de los festejos finales. Obviamente siempre me acuerdo de mi familia que son los que hicieron cosas por mí. El esfuerzo para que uno pueda llegar a esto, de poder compartirlo con amigos. Eso fue algo muy importante y son momentos que marcan para toda la vida.

¿Cuál fue el gol que más gritaste en ese torneo?
Y el de (Rosario) Central. Por lo menos en lo personal. Después, obviamente, el de (José) ‘Pepe’ Sand en La Bombonera.

Tanto en el 2008 como en el 2009 se pelearon los campeonatos ¿Por qué crees que no se pudieron ganar?
Fueron virtudes de los rivales. Por ahí se perdieron puntos en el camino que fueron importantes .Es suerte. Pero a veces, por ahí un rival tuvo más virtud que otro y se lo terminó llevando. Creo que ahí fue donde fallamos.

El 20 de Mayo del 2009 Maradona te convocó para jugar contra Haití ¿Qué sentiste en ese momento?
En ese momento, lo disfruté mucho. Sentí que era como un premio para el trabajo que yo venía haciendo. Y con dos compañeros más del plantel, eso también hizo que se hable muy bien de Lanús. Y lo disfruté muchísimo. Después, uno se ilusionaba y pensaba en poder tener algunas pelotas más oficiales, así que había que seguir trabajando.

Maradona te volvió a convocar para el partido con Panamá el último amistoso que se jugó antes del mundial ¿Qué sentiste al meter ese gol?
Un desahogo, una alegría inmensa, más allá de que por ahí tenía que haber sido centro…pero no te lo quita nadie: es un gol con la selección y esa camiseta vale muchísimo.

¿Fue centro o fue tiro al arco?
No, fue centro. Pero bueno, había mucho viento y se fue metiendo adentro del arco.

¿Cómo te enteraste que ibas a estar entre los 30 preseleccionado para el mundial de Sudáfrica?
Me avisó el presidente del club, que el cuerpo técnico de la selección le había avisado que iba a estar. Me llamó, me lo comentó y un par de horas después me enteré por la tele.


¿Qué sentiste en ese momento?
Sorpresa por haber estado convocado, como que…era todo una sensación rara, no? Al mismo tiempo de disfrute, sabía que iba a ser difícil por ahí estar entre los 23. Pero al mismo tiempo, para mí era una experiencia inolvidable, porque me sumaba muchísimo para lo que hoy es mi carrera.

Después del partido con Independiente ,en el que Lanús perdió 1 a 0 en el estadio del rojo, se fueron definiendo más o menos los lugares que había para los 23 seleccionados del mundial cuando se dio la lista después de ese partido, vos no estabas ¿Cómo te lo tomaste cuáles fueron tus sensaciones?
Con tranquilidad. Era una lista de 30, sabía que quedaban 7 afuera. Yo sabía que era muy complicado, había muchos volantes. Obviamente, uno se ilusionaba, pero al mismo tiempo tenía que mantener la calma y saber esperar el momento indicado para poder tomarse revancha.

¿Te llamo Diego?
No, no. Nos enteramos también por la tele

¿Qué te produce saber que Maradona en un reportaje que le hicieron en televisión que te va a tener en cuenta para la Copa América del 2011?
Todavía falta muchísimo. Hay que seguir trabajando. Tenemos muchas cosas por mejorar, por aprender. Hay que hacer bien las cosas para ganar esos lugares. Así que hay que empezar a trabajar desde ahora y esperar porque falta muchísimo en el camino.

¿Cómo vistes a la selección en la 1ª ronda?
Bien, bien, muy sólida, con individualidades realmente que marcan muchísimo la diferencia. Y después, en octavos, por ahí sufrió un poco más que en los primeros partidos. Pero como te dije recién, con las individualidades en su mejor momento, son muy difíciles de parar.

¿Tenés alguna cábala?
No, ninguna. Trato de mirarlo siempre con las mismas personas e intentar disfrutar de un partido de fútbol.

¿Te sorprendió que Italia y Francia se hayan quedado afuera en la 1º ronda?
Sabiendo que el futbol hoy es muy parejo….se manejan para abajo para arriba…es muy parejo. Hay selecciones que por ahí no venían haciendo bien las cosas en su país y eso también a la larga se va notando mucho.

¿Pensás que Brasil puede llegar a la final?
Son potencias. Son equipos siempre de temer. Siempre tienen muchísima experiencia en los campeonatos del mundo. Pero como te dije, estos son partidos únicos, es decir, es un partido que según cómo te levantaste perdiste y te fuiste a tu casa. Son cosas que uno no puede saber.

¿Cómo vez el partido para el sábado de Argentina - Alemania?
Muy duro, muy peleado. Alemania es una potencia. Tiene jugadores muy buenos, de mucha jerarquía. También jugadores muy buenos de mitad de cancha para adelante que pueden desequilibrar o pueden definirte un partido. Así que vamos a tener que tener un poco mas de cuidado que el otro día.

¿Creés que Argentina pueda llegar a tomarse una pequeña revancha, una venganza del mundial del 2006?
Son partidos totalmente diferentes. Hay que tratar de pensar en este, no tomar nada como revancha, sino tratar de que esta Argentina gane para pasar a semifinales. Pensar solamente en este mundial, porque no sirve de nada pensar en años anteriores. Estos son otros jugadores, es otro partido.

¿Cómo lo vez a Diego como DT?
Bien, con muchas ganas, mucha actitud, motivador. Lo veo capaz de brindarle mucho de su experiencia a cada uno de los jugadores.

¿Te hiciste amigo de algunos de los jugadores que ahora están en el mundial?
No, yo conocía a muchos. Pero son jugadores que por ahí están en Europa y que no tienen mucha relación con el fútbol local.

¿Gritaste el gol de (Martín) Palermo?
Sí, obviamente, lo grité. Grité el de todos, pero el de Martín siempre tiene ese plus. Es un jugador con mucho sacrificio.

¿Te quedás en Lanús?
..Y no sé… todavía estamos entrenando acá y pensando en lo que va a hacer el torneo. Después veremos. Todavía falta mucho tiempo para saber si llega algo no. Y no va a depender solo de mí.